Israelíes demuelen viviendas y arrestan a palestinos


Ramalah, 13/10/08- Fuerzas militares de Israel arrestaron ayer a 10 palestinos y demolieron varias casas durante violentas incursiones en las ciudades de Naplusa, Jenin, Belén y Hebrón, en la Ribera Occidental, denunciaron fuentes locales.

Residentes en Naplusa citados por medios noticiosos palestinos, relataron que el ejército judío irrumpió en Assira Al-Shamaleya, en el norte, y violentaron puertas de varias casas, además de destruir muebles, después de detener a cuatro vecinos.

Las fuentes señalaron que los detenidos fueron conducidos a lugares desconocidos para someterlos a interrogatorio.

Un civil fue arrestado en el puesto de control militar de Howara, en el sur de Naplusa, cuando regresaba a su casa tras concluir su jornada laboral, denunció un familiar.

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Fuentes de seguridad palestinas en Belén reportaron que los ocupantes detuvieron en el retén de Al-Container, en el noreste de la ciudad, a otra persona procedente de la aldea sureña de Al-Khader.

Asimismo, los uniformados patrullaron las calles y causaron destrozos en varias casas de la urbe y apresaron a otros dos jóvenes, mientras utilizaron más de 30 buldózer y carros militares para agredir y demoler una edificación propiedad del palestino Mahmoud Al-Dweak.

Las redadas también fueron ejecutadas contra ciudadanos en Hebrón, donde un número impreciso de viviendas y tiendas sufrieron severos daños durante una operación de búsqueda, según las mismas fuentes.

Las tropas hebreas realizan sistemáticos arrestos casi todas las noches en el territorio ocupado de Cisjordania con el argumento de capturar a palestinos buscados por los servicios de inteligencia y seguridad de Tel Aviv.

Tales acciones se mantienen a pesar del acuerdo entre Israel y la Autoridad Nacional Palestina para el emplazamiento de fuerzas de seguridad palestinas en algunas de las ciudades ocupadas con el propósito de velar por el orden.

El gobierno hebreo y la ANP sostienen conversaciones dirigidas a alcanzar un pacto de paz que ponga fin al principal conflicto en el Medio Oriente, pero hasta ahora se ha avanzado poco.

Prosiguen choques

Mientras tanto, el primer ministro saliente de Israel, Ehud Olmert, ordenó a la policía actuar “con severidad” para sofocar los enfrentamientos que por sexto día consecutivo protagonizan árabes y judíos en la norteña localidad israelí de Acre.

Olmert aseguró haber instruido a las fuerzas del orden "actuar con cero tolerancia y lograr un inmediato final a la violencia en Acre (también se escribe Akko)", que hasta el momento sólo ha dejado un saldo de decenas de heridos leves.
La más reciente ronda de choques intermitentes ocurrió al amanecer de ayer domingo, cuando un grupo de personas incendió un carro propiedad de un residente judío en la parte este de la ciudad, una de las pocas en Israel con población mixta judía y árabe.

Según un reporte policial, se reforzó la presencia de agentes del orden para mantener el patrullaje de la urbe y han sido arrestadas 54 personas desde que estallaron los desórdenes la noche previa al Yom Kippur o Día de la Expiación, el más sagrado para los judíos.

En la reunión del ejecutivo este domingo, Olmert llamó a que se respeten los derechos y tradiciones de los dos principales grupos étnico-religiosos del estado hebreo, y tildó de "pequeños grupos extremistas judíos y árabes" a los causantes de las trifulcas.

Líderes de la comunidad árabe en Acre se reunieron el sábado con los jefes policiales de la ciudad y del Distrito Norte, y dijeron estar dispuestos a reprobar públicamente la actitud del conductor que, según las autoridades, provocó los disturbios el pasado miércoles.

Grupos judíos usaron como pretexto para iniciar los choques callejeros el supuesto ruido intencional hecho por un árabe cuando conducía a altas horas de la noche por la zona hebrea de Akko, atentando contra el silencio habitual en vísperas del Yom Kippur.

El parlamentario por la Lista Unida Árabe Abbas Zakour, afirmó que el liderazgo de esa comunidad en la ciudad también se reunió para discutir las formas de evitar hechos similares en el futuro.

Zakour añadió que se emitirá un pronunciamiento público de críticas al chofer por entrar en el vecindario judío en una fecha sensible, aunque descartó que éste haya tenido el propósito de ofender de forma deliberada a los hebreos, como se ha esgrimido.

Muchas viviendas, vehículos y escaparates de centros comerciales han quedado severamente dañados por el lanzamiento de piedras y otros objetos de uno y otro lado, mientras al menos tres inmuebles propiedad de familias árabes fueron incendiados entre viernes y sábado.

La policía arrestó ayer a tres judíos que también agredieron a los uniformados mientras trataban de imponer el orden.

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